Hace un rato contestaba a un comentario sobre la dificultad de tratar el tema ‘Unity’ de una forma… Con sentido común, pero con perspectiva (o intento de). La dificultad de ser certero es que la vida da muchas vueltas, y en el terreno tecnológico las da más deprisa todavía. Así, ¿qué demonios pasa con Unity estos últimos días?
Supuestamente, la prueba de fuego de Unity comenzó con el lanzamiento de Oneiric Ocelot, que traía muchos cambios a mejor en la propuesta de Canonical. Se trató de una gran mejora respecto a lo presentado en Natty Narwhal, pero no la suficiente, ni mucho menos. La experiencia Unity todavía se resiente en usabilidad, adaptación de las principales herramientas del escritorio a la forma en que los desarrolladores de la distribución quieren que sean las cosas (Firefox, LibreOffice..), además del rendimiento en general, entre otras cosas (por supuesto, habrá muchos usuarios que estén en desacuerdo con ésto, de ahí la controversia).
Hasta aquí es todo razonable: se trata de un desarrollo nuevo que hay que pulir, pero… Mientras tanto, comienza la sangría de usuarios hacia otras alternativas, al menos sobre el papel (léase comentarios en Internet). Y como hablar de Canonical no es hacerlo de una comunidad de usuarios, sino de una empresa que se juega los cuartos, la cosa cambia. Porque podemos esperar a que proyectos como Elementary OS maduren para probarlos o no, pero ¿puede esperar Canonical a tener éxito?
Se ha armado cierto revuelo en la red en los últimos tiempos con el tema de DistroWatch, y lo cierto es que a la hora de la verdad las mediciones de DistroWatch, además de no ser fiables, no tienen ningún valor como medición de uso real. Ninguno. Pero sí sirven para que desde la prensa nos hagamos un poco la idea de la popularidad de las distros en el mundillo Linux. Por DistroWatch le cayó la semana pasada la que le cayó a Ubuntu, e incluso Mark Shuttleworth tuvo que contestar a esa situación.
Pero, hay un sitio que salió a defender a capa y espada a Canonical/Ubuntu, y de paso a ellos mismos, que viven -de manera totalmente honesta, quede claro- de informar acerca de ese «Linux para seres humanos» (no, nosotros, no). OMG! Ubuntu! fue el sitio, y con un artículo de opinión venían a decir prácticamente lo que acabo de decir yo: las cifras de DistroWatch son para tomarlas con pinzas y entretenerse un poco, nada más. El problema es que desde los ambientes más ubunteros se han tomado esas cifras con orgullo durante mucho tiempo, y ahora parece como si olieran mal. Ni lo uno ni lo otro.
Sin embargo, si hay algo que debería ser tenido en cuenta por Canonical, pero que no parece preocuparle mucho a Mark Shuttleworh, que tal vez confía demasiado en sus pruebas de usabilidad (que no están mal, ojo, todo lo contrario; de hecho son la forma correcta de hacer las cosas). Me refiero a la opinión de los usuarios en Internet. A las quejas de los usuarios de su sistema durante años que ahora reniegan de Unity.
Hace un rato otro comentario aquí en MuyLinux dejaba un enlace con una comparación de diferentes encuestas respecto a Unity y las preferencias de los usuarios en lo que a interfaces de escritorio se refiere, dejando entrever que OMG! Ubuntu! mentía -o podía hacerlo- con su encuesta, que a diferencia del resto daba a Unity como entorno ganador.
Tengo que decir que de las encuestas referidas en el enlace anterior, solo la nuestra y la de OMG! Ubuntu! exponían pluralidad, porque las del resto de sitios -incluida Techrepublic con más de 10.000 votos- se centraban en un GNOME 2/Shell vs Unity. Ahora bien, es evidente que OMG! Ubuntu! es un sitio dedicado en exclusiva a Ubuntu, por lo que la parcialidad de sus resultados no debería molestarle a nadie porque es natural.
Sobre lo anterior respondía al comentario citado al principio de este artículo de opinión, que me dice a grandes rasgos que «Unity, al ser utilizado solo por Ubuntu, está en desventaja en la encuesta de MuyLinux, que es un sitio generalista sobre Linux en el escritorio». Es cierto a medias, porque hasta ahora Ubuntu había demostrado que podía volver cualquier encuesta a su favor (con el empuje de sus usuarios/seguidores, se entiende). Y sí, hablo de MuyLinux.
Entonces, es evidente que algo falla con Unity, más allá de que no esté del todo terminado (yo personalmente no puedo entender cómo un usuario de Ubuntu salga espantado por Unity para acabar en GNOME Shell -salvo por el evidente ahorro de recursos, fuerza mayor-, pero cosas más raras se han visto). Queda claro que hay mucha gente disgustada con Unity. Esto ya no es los cuatro usuarios de otras distros diciéndole a Canonical que Ubuntu es fea o comercial. Entramos en un nuevo nivel, con revolución interna.
Así, llegar a cualquier conclusión en estos tiempos de transición es bastante difícil, por no decir arriesgado. Yo apuesto a que Ubuntu se mantenga en primera línea como estandarte del escritorio GNU/Linux de cara al público tecnológico generalista, porque su caída podría ser muy perjudicial para todo el ecosistema de distribuciones (por no hablar del golpe moral que eso supondría para el escritorio en GNU/Linux), pero espero que lo consiga de manera equilibrada, y eso va a ser lo más complicado de todo: crear una experiencia de producto propia, de calidad, sin ceder a presiones externas pero sin cerrarse en banda; un producto para las masas inteligentes, no para las que se lo tragan todo. Ja veurem, que dicen en mi tierra (ya veremos).
Lo mejor de todo es que para quienes disfrutamos de estos temas tecnológicos sin radicalismos, este nuevo horizonte de competencia que se avecina es puro divertimento :)
